martes, 28 de octubre de 2008

Las certezas de Tsiolkovski (y la torre)


“La pareja no se apoya sobre la permanencia del amor y la sexualidad, sino sobre la permanencia de la ternura.”


Esta cita es de Konstantín Tsiolkovski (1857-1935), astrofísico ruso pionero de la astronáutica y autor de “La exploración del espacio cósmico por medio de los motores de reacción” (1903). Ya a finales del siglo XIX escribió tratados sobre sistemas de propulsión, detallados diseños de cámaras de combustión, de aeronaves, mandos de vuelo automáticos y circuitos para el control de elevación de la nave; la fase empírica la llevó a cabo en el primer túnel de viento ruso (creado por él en 1897). Además, realizó interesantes estudios sobre la adaptación del ser humano al desconocido entorno espacial. Sentando así las bases para que un 12 de abril de 1961 la humanidad expulsase físicamente y por primera vez a uno de los suyos del planeta Tierra a bordo de la nave Vostok 1.


Se dice que en 1895, Tsiolkovski, quedó tan maravillado con el prodigio de ingeniería de la torre Eiffel que estudió erigir una estructura similar hasta la órbita, en cuya cima se construiría un “castillo celestial” para desde allí poder lanzar naves al espacio sin cohetes.



1 comentario:

Gulias dijo...

Es curioso como un astrofísico, que aparentemente ha de ser una persona racional con una mentalidad cuadrada, tiene una opinión sobre la pareja tan tierna y romántica. Más allá de la permanencia del amor (que a veces es acaba) y del sexo, nos habla de la ternura... es acaso la ternura la llama del amor y la pasión?